Esta gatita se encuentra en un cole a las afueras de Madrid, está claro que ha sido abandonada porque es muy sociable, enseguida coge confianza y se deja abrazar y mimar. Desde hace tres semanas ha convertido el patio de la cocina en su hogar. El personal de cocina es el que se encarga de alimentarla, jugar con ella y darle muchos mimitos, que le gustan mucho. Es muy cariñosa, a todos los que se le acercan les saluda metiéndose entre sus piernas. Le encanta que la acaricien y le arrasquen la tripita. Por su tamaño, probablemente no llegue al año.
El director del centro, no está nada contento de que la gata esté allí. Dice que por higiene, porque podría meterse algún día en la cocina. Ayer, los conserjes, querían llevársela lejos del colegio y dejarle abandonada en un descampado, para que se busque la vida y no vuelva más al colegio. Hablé con ellos y he conseguido que la dejen un tiempo allí hasta que pueda encontrar un hogar.
Ella se merece ser feliz y vivir con personas que la quieran, la cuiden y la traten bien.
Persona de contacto: gemi-85@hotmail.com
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